¿Sabemos todo lo que las etiquetas de los envases deben incluir?
Les pongo un ejemplo para entender lo importante que es el leer las etiquetas; algunos yogures descremados pueden llevar con respecto a un yogur no azucarado casi el doble de azúcar, con lo que el término “descremado” puede llevar a confusión: se reduce la cantidad de grasa, se incrementan los niveles de azúcar y sal y listo; esto mismo puede pasar con alimentos “light” o “bio” de todo tipo, quitar grasa y aumentar azúcar es algo bastante habitual.
¿Y qué información nos tienen que ofrecer las etiquetas de alimentos envasados?. Vamos a darle un breve repaso:
- Nombre: debe ser lo bastante descriptivo para saber el contenido.
- Lista de ingredientes: se incluyen por orden de peso (de mayor a menor) todos los ingredientes que se utilizan en la fabricación y que permanecen en el producto final. No es aplicable a los productos con un solo ingrediente. Deben incluirse todos los aditivos añadidos: colorantes (E-100), conservantes (E-200), antioxidantes (E-300), especias (E-400), reguladores de acidez (E-500) y potenciadores del sabor (E-600).
- Alérgenos: se tienen que destacar sustancias causantes de alergias o intolerancias. Hay 14 ingredientes que se deben referenciar en caso de que estén presentes: cereales con gluten, frutos de cáscara, pescado, leche y sus derivados (incluida la lactosa), soja, crustáceos, moluscos, huevos, cacahuetes, apio, mostaza, sésamo, altramuces y sulfitos.
- Cantidad neta: el peso o volumen real del contenido.
- Fecha de duración mínima, fecha de caducidad: La fecha de duración mínima refleja el período en que el alimento conserva sus propiedades y aparece como «consumir preferentemente antes del…» o «consumir preferentemente antes del fin de…». La fecha de caducidad aparece en productos perecederos, como el pescado fresco o la carne picada como «fecha de caducidad…». En el caso de carnes congeladas y productos de la pesca congelados se incluye la “fecha de congelación” (pulsar para descargar el folleto informativo de la Unión Europea).
- Condiciones especiales de conservación: se indicará siempre cuando el alimento tenga unas necesidades especiales.
- Datos de la empresa responsable: nombre o razón social y dirección.
- País de origen o lugar de procedencia: solo en algunas circunstancias y siempre en las carnes de cerdo, cabra, oveja y aves de corral; es importante distinguir la procedencia del producto original y la procedencia del producto envasado, por ejemplo se pueden encontrar espárragos peruanos envasados en Navarra y pensar que es un producto “procedente de Navarra”.
- Modo de empleo: siempre que sea necesario.
- Grado alcohólico: siempre que las bebidas tengan más de 1,2 % en volumen de alcohol deberán indicarlo con “% vol”.
- Información nutricional: uno de los contenidos más importantes para saber qué es lo que estamos comiendo. Todo alimento envasado después del 13 de diciembre de 2016 debe indicar valor energético y las cantidades de grasas, grasas saturadas, hidratos de carbono, azúcares, proteínas y sal (pulsar para descargar el folleto de información nutricional de la Comunidad de Madrid).
Adicionalmente algunos alimentos deben incluir el número de lote (se identifica por la letra L) y otros se pueden ajustar a normativas específicas.
Con esta información es más fácil identificar los productos que realmente compramos y es una buena costumbre el revisarla siempre para evitar sorpresas. Por supuesto, esto no quiere decir que tengamos que ser alarmistas y pensemos que los fabricantes y productores están haciendo trampas (por ejemplo, los aditivos no tienen por qué ser malos) pero siempre es bueno conocer lo mejor posible nuestra alimentación.
Fuente: 20minutos.